La valeriana, Valeriana officinalis en su nombre latino, es una planta medicinal que ya era usada desde la antigua Grecia para combatir los nervios y la ansiedad. Hoy en día se utiliza también por su acción sedante e inductora del sueño.
De acuerdo con la farmacopea europea, la parte medicinal de la Valeriana son las partes subterráneas desecadas—el rizoma, las raíces y estolones—, ya sea enteras, fragmentadas o cortadas.
Las propiedades medicinales de la valeriana —una planta ansiolítica— residen principalmente en diversas sustancias conocidas como varenal y valeranona y los ácidos valerénico y acetoxivalerénico.
En cuanto a los usos terapéuticos de la valeriana, la Agencia Europea del Medicamento —la EMA en sus siglas en inglés— contempla entre sus indicaciones el alivio de los episodios de tensión nerviosa leve y para la dificultad de conciliar el sueño.
Indicaciones de la valeriana que también están recogidas por parte de la Sociedad Europea de Fitoterapia (ESCOP).
Respeto a la posología a la hora de administrar valeriana, existen múltiples dosis en función tanto del preparado de valeriana, —ya sea en infusión, polvo, extracto líquido o jugo— como de las indicaciones aprobadas por la Agencia Europea del Medicamento.
A modo de resumen podríamos destacar la siguiente posología según la EMA:
o En extracto seco y para aliviar la tensión nerviosa la pauta es de entre 400 y 600 mg hasta tres veces al día.
o En extracto seco y para el abordaje de los trastornos del sueño, la pauta es entre 400 y 600 mg antes de acostarse y si fuera necesario una dosis anterior a media tarde.
o En infusión y para el alivio de los síntomas leves de estrés mental la pauta es entre 0,3g y 3 gramos de valeriana en 150 ml, hasta tres veces al día.
o En jugo de raíz fresca sería de 10 ml, hasta tres veces al día.
o Y en aceite esencial, la pauta es de 15 mg hasta 3 veces al día.
En todos los casos la dosis nocturna debe ingerirse al menos media hora antes de acostarse.
Conviene subrayar que el uso de valeriana está contraindicado en niños menores de 3 años y que la EMA desaconseja su uso en menores de 12 años al no existir suficiente documentación al respecto.
En el caso de estar tomando valeriana, hemos de evitar conducir vehículos o maquinaria peligrosa después de su administración ya que puede disminuir nuestra atención por efecto relajante y sedante hasta 1-2 horas después de haberla tomado.
Y al igual que sucede con cualquier planta medicinal, es importante notificar su uso tanto al médico como al farmacéutico de confianza para evitar interacciones o efectos adversos no deseados con otros medicamentos.
Recuerda, pregunta siempre a tu farmacéutico de confianza, experto en plantas medicinales. Te aconsejaremos y resolveremos cualquier duda que tengas.
